mayo 16, 2024

El desperdicio de alimentos en Estados Unidos: un problema costoso y ambientalmente dañino

1 minuto de lectura

Según un artículo publicado en Business Insider, si una sola granja produjera todos los alimentos desperdiciados en los Estados Unidos, sería del tamaño de California y Nueva York combinados1. Este desperdicio de alimentos no solo tiene un impacto económico en las familias estadounidenses, sino que también contribuye al cambio climático debido a la emisión de gases de efecto invernadero.

El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos estima que una familia promedio de cuatro personas pierde alrededor de $1,500 al año en alimentos no consumidos1. Estos alimentos terminan en vertederos, donde se descomponen y producen metano, un gas de efecto invernadero que es inicialmente 80 veces más potente que el dióxido de carbono antes de descomponerse1. Este problema no solo afecta a las familias a nivel económico, sino que también tiene consecuencias ambientales graves.

Para abordar este problema, es fundamental que las familias y los individuos tomen medidas para reducir el desperdicio de alimentos. Algunas estrategias incluyen planificar las comidas con anticipación, comprar solo lo necesario, almacenar adecuadamente los alimentos para prolongar su vida útil y aprovechar las sobras. Además, es importante fomentar la educación y la concienciación sobre el desperdicio de alimentos y sus efectos en el medio ambiente y la economía familiar.